Apple quiere que cambiemos nuestros iPhone y Mac, incluso antes de lo que normalmente solíamos hacer. Equipos con uno o dos años no son compatibles con la funcionalidad estrella del iPhone: Apple Intelligence. Y es que, tras la presentación de los nuevos Mac, como el Mac mini o el MacBook Pro, Apple Intelligence se ha convertido en el reclamo número uno para cambiar nuestro dispositivo. El iPhone 16 también hace uso de este recurso de marketing.
La revolución de la inteligencia artificial es lo que exige procesadores muy potentes que hasta hace unos años no estaban ni planificados. Se trata de todo un boom, como el que se vivió en los 2000 con la llegada de internet. Sin embargo, la llegada de la IA está generando (y generará) una preocupante cantidad de residuos electrónicos.
Un estudio reciente publicado en Nature revela que entre 2020 y 2030, la IA podría generar entre 1,2 y 5 millones de toneladas de basura electrónica. Esta cifra es equivalente a tirar hasta 13.000 millones de iPhone 15 Pro. El estudio se basa en cuatro escenarios de crecimiento para la IA generativa:
Estos escenarios reflejan la demanda de la Inteligencia Artificial, siendo en la estimación más baja una cifra impresionante. Y es que lo estamos viviendo cualquiera de nosotros. ChatGPT va a cumplir su segundo aniversario, y Apple Intelligence ya está disponible y en primavera llegará en español.
A cambio, para mover todo esto, hacen falta procesadores tan potentes como el chip A18 o los M4, mayor capacidad de memoria RAM, servidores… El resultado es que muchas personas cambiarán de equipos antes de lo esperado para poder disfrutar de estas tecnologías.
En 2023, se generaron 62 millones de toneladas de e-waste, un 82% más que hace una década.
Como se suele decir, Apple da una de cal y otra de arena. Aunque muchos de nosotros cambiaremos nuestros dispositivos para disfrutar de Apple Intelligence, Apple también hace todo lo posible para reducir su impacto ambiental. De hecho, en 2030 será una empresa neutra en carbono, y productos como el Apple Watch Series 10 o el nuevo Mac mini M4 ya cumplen este estándar.
Daisy puede desensamblar hasta 1,2 millones de iPhone al año
El reciclaje es clave para que todos estos componentes no terminen en el vertedero dañando al medio ambiente. Por ello, entregar nuestro iPhone a Apple para que lo recicle es una de las mejores opciones. Robots como Daisy se encargan de desmontar eficientemente los iPhones y recuperar materiales valiosos. El aluminio de tu iPhone puede terminar siendo parte de un nuevo Mac, y así con el resto de piezas.
En el laboratorio de recuperación de materiales de Austin se usa una trituradora industrial de elementos electrónicos para recuperar materiales preciosos
Por ello, cuando vayas a cambiar tu viejo iPhone por uno nuevo, piensa en darle una segunda vida: esto puede ser dárselo a otra persona para que lo siga utilizando o venderlo a Apple, donde te darán dinero por él y se encargarán de aprovechar las piezas.
La energía que consume la IA también es muy preocupante. Todos los grandes centros de servidores van a necesitar de unos recursos energéticos que hasta ahora directamente no se necesitaban. Apple desde hace años consume energía 100% de origen renovable. Y para muestra de ello están los múltiples campos eólicos que tienen, o proyectos locales como el del campo solar en Segovia, España.
Planta solar de Apple en Segovia, España
Según los cálculos del estudio, estas medidas podrían reducir la generación de desechos electrónicos entre un 16% y un 86%, un porcentaje demasiado amplio. Y es que, sin el compromiso de las personas y, sobre todo, de las empresas.
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